Los años van pasando y van dejando huella en nuestra piel. Casi sin darnos cuenta vemos aparecer poco a poco las primeras arruguitas y nos gastamos mucho dinero en cremas que no siempre dan los resultados que prometen.
Hoy quiero daros un remedio casero y barato para combatir esas pequeñas arrugas que se van acumulando en nuestro rostro. Prepara una mascarilla casera con 200 gramos de espinacas lavadas y escurridas. Una vez secas tritúralas y ponlas a cocer sumergidas en medio litro de leche. Después las cuelas y las colocas en pequeñas cantidades entre un par de gasas y las extiendes sobre la piel.
Si utilizas esta mascarilla casera una o dos veces por semana, verás como la piel de tu cara está mucho más tersa y luminosa.
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